El penalti de Ezaki y Koeman

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En la temporada 89-90 el Mallorca había recuperado la categoría perdida un año antes en la fatídica promoción contra el Oviedo.

Se había hecho una buena plantilla con gente con como Calderón, Claudio y Fradera y manteniendo la base de la temporada anterior con gente como Zaki, Nadal, Álvaro o Vulic.
Sin ser una temporada espectacular, el equipo se mantuvo a mitad de tabla sin pasar apuros de ningún tipo.

Los caprichos del calendario quisieron que todos los equipos se enfrentaran consecutivamente a los dos grandes de la liga. Es más, al Mallorca le tocó afrontar las dos salidas consecutivas al Bernabeu y al Camp Nou, logrando sendos empates a 1. En la primera vuelta, en la visita de estos dos gigantes al Lluís Sitjar, se empató a O con el Madrid de Hugo Sánchez, y la Quinta del Buitre y se derrotó al Barça 1-0 con penalti transfomado por el yugoslavo, posteriormente croata, Zoran Vulic. Era el Barça previo al Dream Team. En él jugaban Koeman y el actual entrenador del Mallorca, Michael Laudrup. Cruyff salvó la cabeza por ganar la copa, derrotando 2 a 0 al Madrid.

Bien pues en el partido de vuelta jugado en Barcelona, el Mallorca había arrancado un valioso empate del Bernabeu, con golazo de Claudio Barragán incluido, y afrontaba con más tranquilidad su visita al templo blaugrana. Y el partido empezó de la peor manera posible. Minuto 1. Gol de Guillermo Amor. Si el Barça se pone por delante en su estadio, muy pocas veces deja escapar algún punto, bien, pues ese día ocurrió. Mediada la segunda parte, se pita penalty a favor del Barça. Se dispone a lanzarlo el infalible Ronald Koeman. En la portería, Ezaki Badou. Se masca el 2-0 que sentenciaría sin remisión el encuentro. En esas que mientras "Tintín" planta el balón, el guardamenta marroquí del Mallorca realiza una postura, cuando menos extraña. No se coloca en el centro de la porteria, como es lo habitual, sino que se desplaza un poco a su izquierda y levanta los brazos en esa misma dirección, indicando al holandés dónde debe lanzarlo. Es decir, deja más de media portería libre a su derecha. Bien pues, Koeman pica, y lo lanza por donde menos espacio tenía y allí estaba Ezaki para rechazar la pelota. Era el primer penalti que fallaba en la liga española. Posteriormente, el Mallorca empataría, mediante un penalti lanzado por García Cortés, que fusilaba a Zubizarreta.